Hemos conseguido una mayor calidad organoléptica ya que el contenido de polifenoles, en verde, es mucho más elevado; esto hace que los matices gustativos sean más intensos y los atributos de amargor más potentes. Es un aceite ideal para consumir en crudo y disfrutarlo con el pan con tomate, ensaladas, carpaccios… y como finalización de cualquier plato.
Además, su alto contenido en polifenoles, convierte los aceites ERM en un formidable antioxidante y en un auténtico aliado en la prevención de enfermedades como el cáncer.
En definitiva, unos aceites de una calidad extraordinaria, con sabores sorprendentes, con unas puntuaciones muy altas en el panel de cata y que constituyen un elixir de salud.